En Génesis  1:1 dice: “en el principio creo Dios los cielos y la tierra…

Usted encuentra, aquí todo el  proceso de creación, todo lo que existe fue creado por Dios.

El verso 2 dice: “y estaba la tierra desordenada y vacía y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo  “, la tierra entra en un estado de caos”.

La palabra “Caos”,  significa un estado de confusión.
Vemos que Dios no empieza en gloria, empieza en desorden.

Dios tiene una peculiaridad, ¿Cuál es? El aparece en el momento de mayor crisis, o de mayor caos  a  El no lo incomoda, no lo ponen mal  las tinieblas, el desorden  porque sabe lo que tiene que hacer.
El dice: “yo se como arreglar esto...”.

Hasta el verso 2, las tinieblas parecen decir: “lo logramos ya está....”.

Principio: ¡La realidad no está siempre en lo que parece!

El texto sigue: y el espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”.   

El espíritu  se movía, en medio del desorden, del caos.
Una persona puede moverse en el espíritu,  pero su vida estar completamente desordenada…¿ por que?  Porque  El no ordena la vida de nadie,  sino lo que la ordena es hablar la Palabra de Dios. El Espíritu Santo veía todo ese desorden y decía: El Padre ya va a hablar la palabra, la luz se va a meter,  Nunca el espíritu va a ser rebelde, irreverente, irrespetuoso, de la palabra. El Padre,  el hijo, y  el Espíritu.  “se respetan mutuamente”. Dios comienza  a actuar.

¿Cómo empezó Dios  a arreglar las cosas? hablando.

¿Esta en caos?, ¿tiene  problemas? ¿como lo soluciona?   De una sola manera hablando, pero  en el sentido correcto, no es decir cualquier cosa, es decir La palabra de Dios. Cuando Dios y nosotros hablamos toda tiniebla se retira,  lo que empezó atado, se desata Lo que empezó desordenado se  ordena, lo que se disposicionó se posiciona

Puede que no haya empezado en gloria, pero va a comenzar a vivir, y va a terminar en gloria”. Este no es tiempo de caos, para la nueva creación, para la iglesia,  es tiempo de gloria, métaselo en el espíritu, este es tiempo de ir de fe en fe,  de gloria en gloria, es tiempo de ir de victoria en victoria 

¡Este es tiempo real, profético de fe, de ir en esta dirección!

Pastor Alfredo Dimiro